Ha llegado el momento de darle vida al exterior de tu casa. Si tienes un jardín, no hay excusas para no disfrutarlo y cuidarlo, el dinero desde luego, no lo es. La gran mayoría de labores de jardinería pueden hacerse con un poco de tiempo y dedicación, lo único que necesita un jardín es tiempo e interés.
1. Limpieza
Lo primero que tienes que hacer es limpiar tu jardín con decisión y con profundidad. Si tienes césped es necesario que lo cortes, que lo liberes de malas hierbas: igualmente revisa todas las plantas, arbustos, árboles… salva lo que pueda ser salvable, poda a conciencia y si es necesario, arranca. Prepara la tierra liberada para la nueva plantación.
2. Nuevas plantas
Olvídate de plantas exóticas ni de otros continentes, apuesta por la flora autóctona de tu zona. Todo son ventajas y ahorro: menos agua, menos cuidados y más duración. No te preocupes por la variedad, te va a sorprender la cantidad de plantas, flores y arbustos que puedes plantar sin salirte de las variedades típicas de tu entorno.
3. Un huerto, muy buena idea
Las hortalizas, las verduras y las frutas son plantas en muchos casos fáciles de cuidar y mantener, además ganas que puedes consumirlas con lo que ahorras en la cesta de la compra. Las semillas no son caras y son fáciles de encontrar. Por muy pequeño que sea tu jardín, encontrarás la forma de reservar un espacio a tu huerto. No te preocupes por el estilo o la apariencia externa, una zona de cultivo cuidada y bien organizada, puede quedar preciosa y muy estilosa, además están de moda.
4. Espacio zen
Los jardines zen se pusieron de moda hace años y siguen siendo una alternativa muy interesante por lo sencillos que son de montar y mantener, además pueden adaptarse a cualquier especio y clima. Solo necesitas una base de áridos o piedras, una fuente o punto con agua y alguna planta para diseñar tu jardín zen: rápido y económico.
5. Mobiliario DIY
Si el problema de tu jardín no son tanto las plantas como el mobiliario o la infraestructura, lo que necesitas es aficionarte a los DIY e ideas de reciclaje con objetos como cajas de frutas, palet, cajas de vino o botellas, entre otras. Con este tipo de material puedes construir por muy poco dinero y tú mismo, todo el material que necesitas para tu jardín: bancos, mesas, sillas o jardineras, por ejemplo.
6. Iluminación
Cuando se va el sol, es cuando tu jardín se queda totalmente abandonado e inservible, parece, sin duda, que el problema del exterior de tu hogar es la iluminación. Puedes arreglarlo con muy poco presupuesto y mucha creatividad, algo de dedicación también te hará falta. Visita la zona de iluminación de las tiendas especializadas en cosas del hogar y bricolaje, te va a sorprender la cantidad de propuestas sencillas y baratas que encontrarás para iluminar tu jardín, también Navidad.
Via .hogar.mapfre.es
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