La zoysia, también conocida como zoisia, puede tolerar más de -10ºC. Pese a que en invierno puede volverse pardo o amarillo, el césped volverá a reverdecer en primavera. Cabe destacar que la zoysia también exhibe una gran resistencia a la salinidad, por lo que resulta apropiada para las zonas costeras.
Su altura no supera los 10 centímetros. La Zoysia japonica crece con lentitud, algo que dificulta su reproducción. A esto hay que sumar que no produce semillas adecuadas para la siembra.
Una vez instalado, sin embargo, este césped resiste enfermedades, el tránsito intenso y la falta de agua. De hecho, la Zoysia japonica puede soportar la sequía durante cerca de un mes.
Debido a la dificultad para obtener semillas viables, el método de multiplicación más frecuente son los esquejas de rizoma. La zoysia se comercializa en tepes para plantar de manera directa.
El crecimiento lento de la Zoysia japonica aporta algunas ventajas en cuanto a los cuidados. Con tres cortes al año (a mediados de verano, comienzos de otoño y fines de invierno) es suficiente para mantener la vegetación saludable. Lo más importante es realizar los cortes durante el primer año, para que la planta se desplace de manera lateral y cubra el jardín de manera uniforme. Al lograr eso, es posible dejar de segar.
Fuente: floresyjardin.es
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