La jardinería es un negocio que mueve enormes cantidades de dinero al año en los países civilizados. Pero el jardín no ha de ser sólo una fuente de gastos también puede ser productivo por eso cada vez más la gente se vuelve hacia el cultivo de vegetales comestibles. Un huerto en el jardín nos proveerá de alimentos para el consumo familiar. Cómo podemos transformar nuestro decorativo jardín en una pequeña huerta que nos ahorrará bastante dinero, es lo que veremos a continuación.
Y no es necesario renunciar a la belleza ya que de hecho podemos combinar ambos tipos de cultivos pues como hemos dicho en otro artículo el cultivo combinado de plantas ornamentales y comestibles es una solución idónea para mantener la salud de nuestro jardín.
El cultivo de verduras y hortalizas, seamos sinceros, requiere de un esfuerzo y atención que no siempre son iguales a las que precisan la mayoría de plantas ornamentales. Tendremos que preparar semilleros, aunque podemos al principio plantar plantones comerciales, estar muy pendientes de riegos y cuidados, vigilar estrechamente las posibles plagas y enfermedades.
Es una tarea dura y constante, sobre todo esto último, pero nos reportará grandes satisfacciones. No hay ninguna sensación que pueda superar al orgullo de alimentarte con lo que has producido con tus propias manos.
Si os preocupa la estética de vuestro jardín echad un vistazo a la fotografía superior, un precioso jardín con cultivos de huerto y ornamentales. Simétricamente distribuido y con una belleza visual realmente increíble. Aunque al principio os pueda parecer inalcanzable tened en cuenta que es posible aunque un huerto con un aspecto más rústico no deja de ser hermoso.
Tal vez penséis que no disponéis de suficiente espacio para tener una huerta en condiciones, no os preocupéis pues los jardines verticales también se pueden crear con verduras y hortalizas.
Acomodad los cultivos a vuestro espacio y circunstancia, si el terreno no es propicio siempre podéis cultivar en cama elevada, además vuestra espalda os lo agradecerá y en realidad tampoco se precisa tanto espacio. Comenzad con cultivos fáciles y seguros, zanahorias, rábanos, lechugas os darán fácil satisfacción e irán incubando en vosotros el gusanillo de la horticultura. Poco a poco podréis asumir nuevos retos.
Fuente / Imagen guiadejardineria.com
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