Aunque la primavera tarde en asentarse, lo cierto es que ya huele a ella: las plantas empiezan a florecer dando colorido a los campos, praderas y por supuesto a los jardines, los cuales empiezan a despertar tras un duro invierno. Estos son, quizás, los meses de más trabajo en nuestro rincón verde favorito.
Y es que las plagas vuelven a estar al acecho, y es conveniente estar alerta. Sin olvidarnos, por supuesto, de que… ¡es temporada de siembra! Así que ya sabes, haz una lista de las flores y plantas hortícolas que quieres tener, y ponte manos a la obra. A continuación te daremos unos cuantos consejos más para que esta primavera tu jardín luzca estupendamente.
Plantas de interior
Limpia las hojas de tus plantas de interior con un trapo humedecido con agua destilada (o de lluvia). Ayudarás a que, no sólo se vean más bonitas, sino también a que puedan respirar mejor y poder, así, crecer adecuadamente.
Aprovecha los días de lluvia (siempre que las temperaturas sean agradables) para sacarlas al balcón, patio o terraza.
Césped
Retira del césped las hierbas que vayan creciendo. Así conseguirás tenerlo mucho más sano y espectacular. No olvides reprogramar el sistema de riego, teniendo en cuenta la climatología del lugar donde vives.
Abonar la tierra
No hay nada mejor para tus plantas que enriquecer la tierra con abono orgánico. Aporta humus de lombriz o estiércol y ya verás como tus plantas lo agradecerán creciendo más vigorosamente y dando gran cantidad de flores.
Espacio
Aprovecha el espacio que tienes, y juega con ello. No pongas más plantas de las que puedas tener, ya que puede suceder que en un futuro el jardín no se vea armonioso. Infórmate de las dimensiones que pueden alcanzar una vez lleguen a la edad adulta.
Da colorido
¡Por supuesto! No deben faltar en un jardín de primavera las flores, el colorido. Atraen a las abejas, mariposas, y demás insectos. O lo que es lo mismo: dan vida al jardín.
Via jardineriaon.com
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