A menudo nos encontramos con consultas referidas a problemas de mantenimiento en jardinería vertical en los cursos que realizamos. La mayoria se resumen en pocos puntos y hoy hemos querido exponerlos. En total son estos 3 errores básicos en el mantenimiento de jardines verticales que hemos seleccionado:
1. “Como veo las plantas con aspecto decaído y percibo poco vigor, aumentaré el riego y abonaré”
No siempre un aspecto decaído es síntoma de falta de agua ni de abono. Antes de realizar cualquier acción recomendamos que valoreis:
– estado de sequedad del sustrato
– funciona correctamente el programador de riego?
– estado fitosanitario ( a veces una enfermedad tipo botritis o fusarium puede afectar a la planta de forma que algunos vasos de saba queden inutilizados evitando el paso de agua y sustancias vitales (solutos y fotoasimilados) para el desarrollo de las plantas
– partes de la planta rotas (ramas, tallos, hojas,…)
Y recordad que abonar, si no es necesario y/o está definido en un calendario de trabajos anual, es preferible no realizarlo (si las plantas no muestran demanda) o hacerlo con menos dosis de la indicada.
2. “Como veo a la planta muy estirada y no para de crecer la podaré de forma drástica”
La poda más drástica o correctiva, como ya comentamos en este post sólo se recomienda realizarla una vez al año ya que supone una resestructuración de la masa aerea. Ese trabajo sierve para renovar y preparar la planta para la nueva temporada. Realizar este tipo de trajado en medio de la primavera o otoño (las dos fases de crecimiento de la parte aerea) puede alterar la brotación de yemas latentes y acabadas de crear para la temporada siguiente, conllevando un desgaste inncesario para la planta.
3. “Como veo algún insecto aplicaré un insecticida total y me quito de problemas”
Esta solución, muy utilizada en la jardinería, hay que empezar a desterrarla. Básicamente por que es facil que “mueran justos por pecadores”. No todos los insectos que encontramos en un jardín (y por ende en un jardín vertical) son perjudiciales para nuestras plantas. Recomendamos que os informéis de qué insecto se trata y en la medida de lo posible utiliceis insecticidas y fungicidas de origen orgánico y de muy bajo impacto ambiental. También podreis evitar y gestionar mejor las plagas utilizando criterios de mantenimiento preventivo mediante podas, gestión del riego, abonado, etc
Via verdtical.com
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