Cuando hablamos de jardinería, casi al mismo instante debemos hacerlo también acerca del abono foliar. Por eso, en esta ocasión consideramos imprescindible ahondar un poco en las cuestiones relacionadas con este aspecto de la jardinería que muchas veces queda de lado, y que nosotros particularmente pensamos como esencial para entender la buena calidad de vida de una especie que depende de la tierra.
Los abonos foliares son muchas veces una de las claves olvidadas en el malestar o muerte de una planta, y para comenzar queremos que tengas en cuenta que se trata de aquel abono que toma contacto con la especie a partir de que se pulveriza sobre las hojas, y de esa forma los nutrientes penetran hasta la savia.
Por estas mismas características, es que debe ser reemplazado en algunas circunstancias muy en particular, como por ejemplo cuando existe el riesgo de lluvias, con lo cual el abono foliar se desplazaría, o también en aquellas situaciones en las que podemos encontrarnos con un sol demasiado fuerte, ya que la transparencia no haría otra cosa que quemar la planta.
Más allá de eso, el abono foliar es uno de los más utilizados del mundo porque cuenta con la particularidad de que se absorbe rápidamente y es metabolizado a los pocos minutos por la planta, de modo que la afecta de forma directa. Cuando lo que queremos es que el abono tenga efecto inmediato, tenemos que utilizar el abono de tipo foliar.
Eso sí, tienes que tener en cuenta que, en cualquier caso, los abonados foliares hay que tomarlos como un complemento, ya que los principales deben provenir necesariamente de los alimentos que ponemos al alcance de las plantas. De esta forma, la planta tendrá todos los nutrientes que le sean necesarios, como por ejemplo el hierro, el manganeso y el cobre, entre muchos otros que el alimento y el abono foliar le brindan.
Via cuidatujardin.com
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario